Sientes que tu respiración va a mil por horas,escalofríos, sudoraciones, mareos, vértigo, sensación de estar atrapado en un ambiente sin salidas, te desesperas, te da ganas de gritar o salir corriendo, sientes una persecución innata que etiquetarlo cuesta!... y te preguntas ¿qué me pasa? te quedas inmóvil, quieto, pendiente de alguna señal de alerta que tu cerebro te comunica, de repente, sientes que te ahogas como si te asfixiaras, tiemblas y afloran las palpitaciones segundo a segundo, entonces te llega las ganas de llorar, llorar, se empodera de ti la desgana estás y no estás, sufres bloqueos mentales, a veces te olvidas de algunas palabras o no sigues una conversación con algún amigo, ¡te pierdes! es como si tu mundo interior rebozara de incertidumbres y preocupaciones, pensamientos que te limitan,...
te afloja el impulso, te estremece como sin aliento te quedaras, sin apetito, sin ganas de comer.
Tu cuerpo pierde las ganas de alimentarse o al
contrario, a veces engulles como si fueras un león hambriento, te pasas el día
comiendo trocitos aquí, trocitos allá comer te hace sentir bien, o quizá cubre
la sensación de vacío, soledad o preocupación que en
este momento te atormenta.
Te enfadas contigo
mismo, te cuestionas, te alienas, te entristeces, huyes de tus círculos, de tu
entorno, y te encierras, no afrontas, huyes, y te quedas en tu zona de confort,
en tu lugar seguro, cierras las puertas al exterior y lo controlas, sientes miedo y no sabes a qué?
¿Miedos? de donde vienen
estos miedos…? a la oscuridad, a sitios cerrados
(claustrofobia) te desesperas, pero tampoco piensas salir, te desquician los
lugares abiertos(agorafobia), te escondes y no plantas cara!.
Si!!! No encaras la
situación, no haces frente, sigues en
tu zona de comodidad, obvias tus recursos, esperas de los
demás
pensando que solucionarán por ti, pero el único con herramientas, fortalezas, cualidades
y recursos para hacer frente a este fenómeno llamado ANSIEDAD eres TÚ.
La
Ansiedad es una reacción automática que nos ayuda a
enfrentarnos a situaciones difíciles y amenazadoras, por ejemplo llegar a
tiempo al lugar de trabajo, cumplir con las obligaciones, acudir a una visita
médica, concentrarse a la hora de conducir con mucho tráfico, recoger a los
niños del colegio, etc, en algún momento nos causan emociones y sensaciones ansiógenas, de estrés,
pero dentro de los límites normales hablamos de ansiedad positiva que implica
tener precaución, nos permite controlar nuestras propias emociones, ayudándonos
en situaciones difíciles a salir airosos de ellas.
La
ansiedad patológica o negativa es la
preocupación exagerada que nos lleva al pánico y al descontrol, causando un
cuadro de malestar generalizado como conductas de evitación de determinadas
situaciones, inhibición o bloqueo psicomotor, sensación de falta de control de
la propia vida, la persona no sabe de dónde vienen los sentimientos de pánico y
miedos.
Por otra parte, ¿puedes
cambiar la vida estresante que llevas, y
que muchas veces se convierte en una asfixia
y retención caótica en tus propias
emociones y sentimientos negativos tales
como la rabia, la tristeza, la ira, la prisa, la desesperación, las
perturbaciones, las fobias, etc.?
La respuesta está en tu
capacidad de reconocer y afrontar cada situación emocional que desencadena en
ti el descontrol de tus propias interacciones a nivel biopsicosocial, es decir,
en tu integridad biofisiológica tu cuerpo, tu mente o psique, y tu entorno, tus
redes sociales,
sean familiares, amigos, compañeros de trabajo, etc., por lo
tanto, tu tarea es la de integrar y
rescatar desde tu deseo más profundo el potencial de ser el motor de cambio que
estimula a resaltar en ti la confianza de existir en un espacio donde el guión
de tu vida lo escribes tú, en un idioma que brota con dosis de energía positiva,
de pensamientos activos con empuje; de
canjear las ganas de afrontar los momentos de huidas o miedos a borrar miedos,
borrar sentimientos de inferioridad, borrar pensamientos negativos, borrar
prisas y dar bienvenida a la tranquilidad, a la mansedumbre a creer en ti,
a apostar por tu capacidad de borrar tus vivencias amenazantes.
En tus manos está
manejar la situación, los síntomas no importan, el protagonista eres tú.
Es importante que un
profesional (psicólogo, psiquiatra, terapeuta)te acompañe, te guie y ayude en
técnicas y toma de decisiones para bucear en tu interior, así mismo descubrir
tu potencial, percibir tu locus de
control y asumir el reto para Superar la
Ansiedad.
Es tu momento abandona tu Zona de comodidad!
Respira!...inhala…exhala!...relájate
y prepárate para
masticar, saborear, sentir y practicar a partir de ahora
los:
10
Tips para Superar la Ansiedad y no
estresarte en el Intento.
1- Voluntad y Autoconocimiento: “Querer
es poder”, intentarlo no cuesta,.. hacer frente a la Ansiedad, se puede! Bucea,
navega en ti, descúbrete y rescata tu aptitud y actitud proactiva que te
identifica y da la cara a tus fobias, preocupaciones y malestares.
2- Cambio de Perspectiva y Pensamientos Negativos:
El eje lo conduces tú, tus pensamientos y expresiones o mejor dicho tu forma de
pensar condiciona tus emociones y tu comportamiento. Si afirmas que hay
amenazas, que estás al límite, tu sistema nervioso se activa y desencadena la
respuesta de ansiedad. Háblate a ti mismo con frases positivas, hazlo!
Homenajéate con palabras que te animan!
Aprende a decir No a las situaciones
propuestas que no quieres en tu vida, ejercita tu derecho a decir no, sin
miedos, ni sentimientos de culpa.
3- Distraerse: Tu
zona de comodidad te atrapa, es hora de desafiar nuevos paradigmas, sal de tu
lugar seguro, es difícil lo sé, salir de tu zona de comodidad significa temblores,
sudoraciones, palpitaciones, miedos, no
obstante, ¿sabes lo que te espera? Te espera tu capacidad para el
enfrentamiento a nuevos horizontes, atrévete a dejar tu zona, conoce nueva
gente, nuevos sitios, visita lugares, viaja!, Utiliza el sentido del humor, la
risa es un antídoto contra el estrés. “Perderse para encontrarse con uno mismo”.
4- Enamorarse: enamórate
de la vida, de tu vida, de tu cara bonita, de tu cuerpo, de tu ser, de todo que
te identifica como ser humano, como persona, enamórate de tus logros, de tu
esfuerzo, de tu andar, de tu día a día, del despertar, del sol, de la luna, de
las calles, del cambio, del frío, del calor, de las noches sin dormir por
motivos y circunstancias de la vida,…enamórate!
Relájate de la forma que tu prefieras, con
música, tumbado en un sofá, en el césped del parque de tu barrio, en el autobús
o tren camino al lugar de trabajo,un buena lectura, en una habitación a solas con
un fondo musical, con movimientos corporales como yoga, la relajación muscular progresiva de
Jacobson que trata de tensar y relajar cada
parte del cuerpo, desde la cabeza hasta la punta de los pies, practicar taichí o la biodanza. Olvídate del estrés, de tu
ansiedad.
6- Aprender/arriesgarse:
“Toda persona debe decidir una vez en su vida si se lanza a
triunfar, arriesgándolo todo, o si se sienta a ver el paso de los
triunfadores.”
(Thomas Alva Edison (1847-1931) Físico e inventor
estadounidense).
Arriésgate,
decídete, otros no lo harán por ti, es mejor arrepentirse por algo que por lo
menos has intentado que por algo que ni siquiera te atreves a intentar.
Da
un paso en frente, sigue, suma, sigue, no pares, rompe
esquemas, el eje lo
conduces tú!
Recuerda, no lo olvides… basta de miedos e incertidumbres, de
tristezas y lamentaciones, los lamentos no te llevan a ningún sitio, cambia el
chip, el foco, abre tu mente a nuevos aprendizajes y experiencias, sé flexible
contigo mismo no te tortures con exigencias y límites negativos, por ende sé
flexible con los demás.
7- Afrontar
y no huir: Saca partido de tus fobias, eres mucho
más que tus temores, ¿ sabías qué? Gigante eres cuando te propones a enfrentar,
a no huir de tus situaciones, emociones, sentimientos amenazantes que te
asfixian, de tus palpitaciones, pesadillas, temblores, vértigo, desengancha,
suelta!!!
Suelta a tu Ansiedad, despréndete de ella hay momentos en tu vida
mucho más importante que estar pendiente y alerta de lo que está pasando en tu
cuerpo.
8- Buena Alimentación, evitar excesos:
evitar
alimentos que favorecen la ansiedad, como café en exceso, chocolate en exceso,
bebidas alcohólicas, en fin con sentido
común todo lo excesivo no es bueno para la salud, prueba alimentos ricos en
magnesio y triptófano, que se convierte en serotonina, un neurotransmisor que
calma y ayuda a la relajación. Los granos enteros crean energía saludable al
tiempo que reducen el hambre, ambos importantes para la ansiedad.
9- Practicar Deportes: el ejercicio físico es
nuestro mejor aliado para combatir la ansiedad, el deporte nos ayuda a
sentirnos libres de problemas, nos ayuda a relajar, a estar alegres y a no
preocuparnos, así también nos proporciona energía y vitalidad. Algunos deportes recomendables
para hacer frente a la ansiedad son la natación, pilates, zumba, etc., a qué
esperas? Actua...muevete, ensaya tu nuevo escenario !!!
Actuar:
Recuerda,
nadie lo hará por ti, no esperes de los demás, la vida te espera a ti, está llena de
sorpresas agradables, esfuérzate cada día, con cada paso que des estarás
logrando cada día ganar el partido a la ansiedad, explora tu vida sin temores,
es obvio que hay días grises, pero tú puedes pintarlas de colores atrevidos,
extrovertidos y alegres, basta de quejarte, es momento de actuar, de hacer, de
afrontar, de sentir, de pensar positivamente y realizar, dibujar momentos
optimistas con energía en la que el líder de ese momento de cambio y éxito seas
tú.
(Norma Duré Riquelme)